Según el artículo publicado en el diario LA TERCERA del domingo 8 de mayo de 2007 y basado en los datos publicados por el consejo superior de educación, y en el intervalo de tiempo comprendido entre el año 2001 y 2006 se puede inferir que:
Nuestra carrera junto con medicina y odontología se encuentran en franco incremento del número de alumnos matriculados durante el periodo de tiempo antes señalado.
Las carreras del área salud han aumentado en cuanto a matricula, las universidades estatales, del honorable consejo de rectores y las instituciones privadas han dado respuesta a esta demanda aumentando explosivamente las vacantes, creando nuevas escuelas pero no entregando siempre la mejor calidad.
Los cupos en las universidades chilenas para la carrera de enfermería aumentan desde 640 a 3678, correspondiendo a un 244% el crecimiento de la matricula nacional de alumnos.
Es preocupante como ya en algunas carreras de la salud se observa una pequeña baja en cuanto a los puntajes de ingreso, tal es el caso de Kinesiología, Psicología y odontología; no obstante en enfermería, tecnología médica y medicina esto está lejos de ocurrir más por el contrario los puntajes aumentan año a año.
Existen carreras que se encuentran en un periodo de disminución considerable en cuanto a matricula relacionado con la saturación del mercado ocupacional y la sobreoferta académica. Este descenso en la matricula está directamente relacionado con la disminución de los puntajes de ingreso y a la vez con la disminución de los salarios desde un 10% a 18%.
EN BASE A LAS PREMISAS SEÑALADAS ANTERIORMENTE PODEMOS INFERIR.
La carrera de enfermería cursa hoy en día por un momento de gran esplendor con respecto a las nuevas oportunidades que se abren en el campo laboral con la creación de la subdirección de gestión del cuidado, el incremento del campo de acción en Salud familiar y por supuesto el déficit de enfermeros (as) clínicos en los diferentes hospitales del país.
Este fenómeno ha sido percibido por las instituciones de educación superior y también por los egresados de educación media, dando como resultado las cifras que anteriormente se mencionan, cifras que a mi juicio, más que ser alentadoras, pueden sernos muy desfavorables si no tomamos ya las iniciativas necesarias como Cuerpo Universitario y como Profesionales (según sea el caso).
Ciertamente no debe estar dentro de nuestros planes matar “la gallina de los huevos de oro” y en cuanto a eso debemos individualmente tomar consciencia de la realidad que está a la vuelta de la esquina, que nos puede convertir dentro de algunos años en una carrera con mercado laboral saturado, con su respectiva disminución de la calidad de profesionales egresados y por ende de los sueldos.
Por tanto hay que apoyar las instancias que se dediquen a la mejora de la práctica de enfermería, a la certificación de la calidad universitaria, favoreciendo las instituciones estatales y tradicionales sin fines de lucro, y la modificación de las leyes que aún nos son desfavorables; que en definitiva evitan el control y supervisión de nuestra carrera o profesión.
Espero la presente sea una pequeña actualización, contextualización y un llamado a la acción a aquellos que han estado pasivos o distantes, y a los que nos esforzamos día a día por una carrera, profesión y arte mejor, buscar nuevas puertas que golpear y ponernos a trabajar.
Sergio Sánchez Zamorano
Presidente ccaaenfermería
Universidad Arturo Prat Sede Victoria
Congreso dirigido a profesionales de enfermería
